jueves, 4 de junio de 2015

Reportaje exclusivo: Dos días en La Roca

 
    “Lex, dura Lex”, es la sentencia para todos los que incumplen las reglas sociales establecidas, incluso para los que la cumplen y de pronto asoma la señora Injusticia con su rostro repudiable y grotesco. Así, ladrones, incluso de cuello blanco, traficantes, transgresores de reglamentos viales, asesinos, deudores de obligaciones familiares, violadores, asaltantes de domicilios, lanzas y otros tantos, se dan cita en los mismos lugares, en las prisiones más seguras del Ecuador.

 
     20h00 de un día cualquiera: Juan llega a La Roca conducido por dos policías. No hay resistencia del detenido por conducir sin sus documentos en regla. Momentos antes perdió sus papeles en el baño de un restaurant. La Roca es una ciudad enorme. Se ve de fuera solitaria pero aloja a cerca de 500 individuos hombres y mujeres. En el primer paso nuestro personaje, sereno y a la espera de lo novedoso, presenta sus documentos de identificación, lo obligan a dejar en una bandeja todas sus pertenencias personales, y queda con camisa y pantalón. Luego pasa por filtros que comprueban la tenencia de armas, drogas u objetos metálicos. Dos equipos electrónicos examinan su organismo. Siempre las cámaras lo siguen por cada sitio que pasa. Luego va por otro y otro lugar en donde queda registrado junto al motivo de su detención. No hay posibilidad de escape. Llega a un punto final en donde, si tiene suerte, recibe una cobija o un uniforme naranja en caso de ya estar sentenciado, hasta que llega a la celda asignada. Silencio total, salvo el ruido funesto de la puerta metálica que se cierra a sus espaldas.

 
    Ya está Juan en la celda. Como es temprano y la luz interior apagan a las 10h00, los compañeros lo miran y preguntan: ¿Cómo te llamas? ¿Por qué te traen? El “caporal” le indica el lugar que debe ocupar. Es curioso, tienen un jefe conocido con ese nombre, es quien ordena y debe ser respetado. Impone el aseo, ayuda en algo, lo consultan, lo decide. Después de todo es una autoridad en tales circunstancias. Para el caso de Juan el “caporal” se llama Guillermo, tiene 32 años, se encuentra ya dos meses, le faltan tres para cumplir su pena. Juan pregunta el nombre de los más cercanos y por qué están allí. De igual modo responde a las preguntas de ellos. Es triste la historia de cada uno, las lágrimas no faltan. Es un submundo en donde se mezclan la droga, el delito callejero, la violencia doméstica y el alcohol. En la celda no hay papel ni lápiz, ni televisión ni radio ni reloj, todo queda anotado en el fondo de la conciencia de cada uno. Un caso de emergencia en esos momentos sería fatal porque comunicar al guardia de turno resulta casi imposible, razón por la cual urge dominar la mente y la serenidad personal. Dormir es una misión imposible, además de que se mezclan las energías negativas, el mal olor y el sonido de los insomnes. El baño con tazón de metal y salida de agua ultra rápida, una ducha y un lavabo, se utilizan a cada momento y todos los diez internos aceptan ese ruido permanente.
     La luz vuelve a encenderse a las 06h00, es una nueva esperanza, el grupo se reanima, uno que otro comenta algo, uno a uno pasan a hacer sus necesidades, otro ora sentado, alguno hace ejercicios, después de todo, dice un detenido, “este no es un hotel cinco estrellas ni un premio por nuestro mal comportamiento”. “Por algo será que Dios nos pone en este lugar”, sentencia  el “caporal”. José Miguel es oriundo de Milagro, tiene 26 y purga una pena de 3 meses por alimentos; Antonio es de Latacunga, debe estar seis meses por violencia callejera; Pedro es lojano y está cuatro días de los 15 que le corresponde por agresión a sus esposa, pero dice que ya no quiere volver con ella; de los restantes, están por diversos motivos: conducir en estado de embriaguez, por no portar documentos para conducir, por uso y tenencia de drogas, etc.
 
    Después de llegar a  la celda, ojalá al día siguiente, los detenidos son llamados ante el juez que analiza su causa, y sentencia, la misma que consiste en multas, rebaja de puntos en licencia de conducir, años, días o meses de prisión, o en ciertos casos, por atenuantes, penas sustitutivas, como trabajo comunitario o detención domiciliaria. El desacato, o sea la desobediencia a la decisión del juez, es grave y también muy grave el irrespeto y agresión a policías y agentes del orden. Sin embargo, Santiago, un joven de Nabón, dijo que al arrestarlo lo golpearon “sin motivo”.
   A las 08h00 todos los internos, hombres y mujeres, acuden al desayuno, un jarro de colada y dos panes. “Cuando salgamos y nos veamos afuera, les dice Juan a sus ahora amigos, yo les invito una comida diez sobre diez, no esta pendejada”, causando la risa de todos los del grupo. El almuerzo es un caldo simple y un plato de arroz con un pequeño “adorno”, según comenta Julio, un hombre procedente de Macas. “Yo cuando salga quiero enviarles una buena funda de frutas y pan”, dice, pero no permiten, peor dinero. Creo que las escenas se repiten en las diversas secciones de alta, media y mínima peligrosidad: hay un patio de 40 x 5 metros para recibir el sol, cuando hay o para pasear y conversar, también talleres y canchas. En las celdas apenas una claraboya por donde el guardia trae novedades o los detenidos hacen llegar mensajes en clave a otros, o cantan y declaman poemas antes de dormir. Algunos hombres y mujeres a lo lejos se llaman y hasta dicen, “te quiero”. ¿En dónde no estará presente el amor?


    Policías, agentes penitenciarios y tropas de élite están a la entrada de La Roca. La seguridad es total, o como dijo sonriendo una chica agente, “casi total”. El escape es prácticamente imposible. Salvo unos pocos casos, dice un policía, “aquí ahora la honestidad está de moda”. Sigo a Juan que días después abandona La Roca con orden de excarcelación dictada por un juez, me habla de la diferencia del aire de libertad, comprendiendo el valor de cumplir con la ley y el respeto a lo establecido. Vira su rostro y alza su mano al despedirse de sus ex compañeros que quedan allí esperando su oportunidad. El pesar parece quedar atrás, pero más bien lo persigue, por tantos y tantos casos de dolor, sufrimiento y tensión encerrados en esas pareces frías de cemento, de las cuales no escapa nadie, salvo el pensamiento, que vuela lejos, muy lejos hacia el calor de los seres queridos y la codiciada libertad.

César Pinos Espinoza
cesarpinose@hotmail.com

martes, 26 de mayo de 2015

Páginas que casi nadie conoce...pero que debemos conocerlas.



Pasaje de "ESPEJOS", de Eduardo Galeano. Mons. Romero y Juan Pablo II
En la primavera de 1979, el arzobispo de El Salvador, Oscar Arnulfo Romero, viajó al Vaticano. Pidió, rogó, mendigó una audiencia con el Papa Juan Pablo II, pero en vano.



Por fin, poniéndose en la fila de los fieles que esperaban la bendición, Romero sorprendió a Su Santidad para robarle pocos minutos. Intentó entregarle un voluminoso informe, fotos, testimonios, pero el Papa no lo aceptó. "No tengo tiempo para leer tanta cosa" le respondió. Romero balbuceó que miles de salvadoreños habían sido torturados y asesinados por el poder militar. Que ayer no más, el ejército había acribillado a 25 ante las puertas de la catedral. El Santo Padre lo paró en seco: "No exagere, señor arzobispo!" Y luego exigió, mandó, ordenó:
"Ustedes deben entenderse con el gobierno! Un buen cristiano no crea problemas a la autoridad! La Iglesia quiere paz y armonía"
 
Diez meses después el arzobispo Romero cayó fulminado en una parroquia de El Salvador. Las balas lo alzaron en plena misa, cuando estaba alzando la hostia.
Juan Pablo II , no hace mucho, fue declarado beato.
 
 

César Pinos Espinoza
cesarpinose@hotmail.com

viernes, 3 de abril de 2015

Comentario: "El oro no vale nada"


     Programas científicos como “Cosmos”, con Neil Tyson (National Geographic) nos llevan a una profunda reflexión: El universo es increíblemente inmenso y somos una mota de polvo, nada. En estas circunstancias, no nos queda otro camino que la humildad. No cabe, es absurdo y loco un mundo con fronteras, con corrupción, con tanta ignorancia e imposición de unos pocos sobre otros, una enorme mayoría.
     La fugacidad de la existencia humana es evidente, las ambiciones y sueños, algo necio y efímero, como el agua que se va entre los dedos; la paz y armonía, una urgente necesidad. En verdad, una profunda reflexión sobre el tema, nos puede ofrecer consciencia sobre la inutilidad y levedad de todo lo que existe. Lo breve de la vida y su imperceptible importancia en el inconmensurable universo, nos deja perplejos, al borde de la nada.


     Una sonda Pioneer enviada hace no mucho tiempo al espacio, para que no retorne jamás, tiene la misión de enviar información durante millones de años, y si solamente meditamos que vivimos en el año 2015, que nuestra era más o menos conocida parte del año 1 y que sólo conocemos escasamente lo que ha sucedido entre 7 y 10 mil años A. C., no sabemos nada. Si dicho aparato está programado para fotografiar nuestro planeta dentro de miles de años, se espera que para ese tiempo la vida en la Tierra habrá desaparecido sin dejar rastro. No quedarán huellas de pirámides ni rascacielos ni gente y el planeta seguirá vagando en el espacio de nuestra galaxia entre millones y millones de cuerpos celestes, también perdidos en la inmensidad de millones de galaxias en un impresionante universo conocido, como una insignificante mota de polvo sin vida, sin la más leve huella o recuerdo de civilizaciones, guerras, líderes importantes, héroes, religiones y seres admirables y hermosos. Tanta hermosura y sublimidad para nada.



   Entonces, qué hacemos hoy, qué buscamos, hacia dónde creemos que vamos. En verdad sin rumbo y sin destino, como el planeta, como el universo. Y nuestra vanidad persiste, vanidad de vanidades como dice la Biblia. Nos creemos importantes, y no sabemos nada, Nos creemos necesarios, luchadores y estamos más o menos desesperados por solucionar de la forma que fuere nuestros problemas diarios, hasta que le toque a cada uno su término, sin que sepa cuándo. Seguimos disimulando, olvidando o tratando de olvidar cada día, cada hora, que nada tiene sentido, sino sólo el placer, humilde placer de conocer, de saber, de disfrutar, siquiera unos momentos. Y no hay que olvidar la sentencia del filósofo español, José Luis Sampedro, “El tiempo no es oro, el oro no vale nada, el tiempo es vida”.

César Pinos Espinoza
cesarpinose@Hotmail.com
03-ab-15

miércoles, 1 de abril de 2015

La historia de Oseas y Gomer


Oseas se sentía bastante desanimado. Acudió a Dios y este le dijo algo muy extraño: "quiero que te cases. Creo que Oseas debió de animarse al oír eso, porque era soltero, y Dios le dijo: "te he escogido a una amiga. Cuando mencionó el nombre de la muchacha, a Oseas le latió el corazón con fuerza, porque el nombre de la joven era Gomer, la muchacha más hermosa de Israel y Oseas estaba realmente interesado.

Pero Dios le dijo: "Quiero que sepas la historia entera de esta joven, te va a ser infiel, de hecho, se convertirá en nada menos que en una vulgar prostituta. Pero a pesar de todo quiero que te cases con ella. No cabe duda que Oseas debió sentirse profundamente intrigado por el extraño mandato de Dios, de igual manera que se debió sentirlo Abraham cuando Dios le mandó que cogiese a su hijo y le matase, que matase a su propio hijo. En ocasiones Dios hace cosas extrañas, cosas que nosotros no entendemos, que no podemos clasificar, cosas que no parecen encajar con lo que creemos que sabemos acerca de El. Y esa es una de esas cosas extrañas. Dios le dijo a Oseas: "Quiero que te cases con esta muchacha, que se convertirá en una ramera, en una prostituta corriente y común, pero tendrás tres hijos, dos niños y una niña. Y cuando nazcan quiero que me dejes que sea yo quien les ponga los nombres. Tal vez en esos momentos Oseas comenzaría a entender algo de lo que Dios estaba haciendo. Sabía que en Israel era la costumbre enseñar por medio de señales, Dios usaba con frecuencia este método para instruir a su pueblo, y que los nombres eran muy importantes. Dios usaba con frecuencia los significados de los nombres para enseñar a Israel ciertas verdades y en aquellos momentos Dios planeaba usar a este profeta y a su familia como una lección objetiva para su pueblo.

Así que Oseas fue a hacerle la corte. Y ¿cómo no? Gomer se sintió atraída por aquel muchacho tímido y al final él se armó de valor y le pidió que se casase con él. Ante su gran alivio la muchacha accedió y se casaron. Al principio su unión fue como el cielo en la tierra. Oseas amaba a esta muchacha. No se puede leer esta profecía sin darse cuenta de ello. Debieron ser inmensamente felices juntos, y luego tuvieron  su primer hijo, que era un niño, tal y como Dios les había dicho. Oseas rebosaba de felicidad y acudió a Dios para que le dijese qué nombre debía ponerle a su hijo: "¿cómo debemos llamarle? Ante su sorpresa, Dios escogió el nombre Jezreel, que quiere decir "naufragar”, un nombre vergonzoso en Israel.

¿Recuerdan la sangrienta historia de la reina Jezabel y de Acab? Acab engañó a su vecino, le quitó su propiedad y le robó su viñedo y Jezabel fue la reina malvada que le hizo hacerlo y por Dios la juzgó. Un día estaba ella mirando por la ventana, desde el piso alto, cuando Jehu, un general, que estaba en el patio, ordenó a los criados que tirasen a Jezabel por la ventana, cosa que hicieron. Ella quedó muerta en el suelo y los perros se la comieron, y desde entonces ese patio fue conocido con el nombre de Jeezrel (2ª Reyes 9:30-37)

Con el paso del tiempo le nació  una hija, a la que pusieron por nombre Lo-rujama que significa "persona a la que no se le tiene ninguna lástima o compasión”. Imagínese lo que es ponerle un nombre así a una hija suya. Quería decir que Dios ya no tendría más compasión de su pueblo si seguían en su postura de rebeldía obstinada porque se le estaba acabando la paciencia.  Cuando la niñita fue destetada, Gomer concibió de  otro niño y Dios le puso por nombre Lo-ammi, que significaba "no sois mi pueblo y yo no será vuestro Dios”.  

Después de esto ya no hubo más niños en la casa de Oseas y Gomer comenzó a cumplir la triste predicción, que había hecho Dios cuando le dijo a Oseas que se casase con ella. Qué terrible sufrimiento debió causarle a este joven predicador escuchar los rumores que comenzaron a circular acerca de su esposa y sobre lo que sucedía cuando él se ausentaba y se iba a predicar a otros lugares. Hasta es posible que sus propios hijos hiciesen inconscientemente algún comentario acerca de los hombres que iban de visita a la casa cuando el padre estaba ausente y no pasó mucho tiempo antes de que los niños quedasen sin atender mientras Gomer se pasaba todo el tiempo acostándose con todos aquellos hombres.

Un día Oseas llegó a su casa y se encontró una nota de Gomer: había decidido buscar la felicidad que se merecía y le dejaba a él y a sus hijos para seguir al hombre que realmente amaba. Pero la pobre Gomer iba pasando de un hombre a otro, hasta que cayó por fin en manos de un hombre que pudo pagarle su alimento y su ropa. Su primer amante le había regalado una estola de visón, pero éste hacia que se tuviese que vestir con la ropa que encontraba en la beneficencia. Al profeta le llegaron noticias de la vida tan desgraciada que llevaba su mujer y fue a buscar al hombre con el que estaba viviendo. Sabía dónde le encontraría, en la taberna de la ciudad, y cuando se encontró con él es muy posible que la conversación se pareciese a esta: ¿Eres tú el hombre que estás viviendo con Gomer, la hija de Diblaim? El hombre debió contestarle: "Si es que es asunto tuyo, lo soy efectivamente. Oseas le dijo: Pues yo soy Oseas, su marido a lo cual siguieron unos momentos de profunda tensión. Pero el hombre le preguntó: "¿qué quieres? Yo no he hecho nada malo. Oseas le dijo: "escucha, no es mi intención causar ningún problema, pero sé que tienes dificultad para que te llegue el dinero. Quiero que cojas este dinero y que le compres a Gomer algo de ropa y que te asegures que tenga toda la comida que necesite. Si necesitas más dinero te lo daré. Es posible que aquel hombre pensase "no hay loco peor que un viejo loco. Si este cretino quiere ayudarme a pagar los gastos, mejor para mí. De modo que cogió el dinero, le compró algunos alimentos y volvió a su casa.

Puede que piense usted "¡vaya una locura, que un hombre haga semejante cosa! Pero ¿quién puede explicar las locuras que comete el amor? El amor existe aparte de la razón y según su propia naturaleza y lo que hizo Oseas lo hizo por amor. No cabe duda de que debió de contemplar a distancia para ver si podía contemplar durante unos segundos a la mujer que amaba mientras ella acudía apresuradamente a la puerta para coger los alimentos que llevaba el hombre en sus manos y darle las gracias por lo que le había traído, por los regalos que había hecho posible el verdadero amor, que había ofrecido la infamia y que la insensatez había aceptado.

No sabemos con seguridad cuánto tiempo duró esta situación, pero por fin llegó la noticia de que la mujer a la que amaba Oseas iba a ser vendida como esclava. El marido con el que se encontraba en aquellos momentos se había cansado de ella y debía ser vendida como esclava. El profeta, con el corazón destrozado, no sabía lo que hacer y acudió a Dios llorando. Dios le dijo: "Oseas, ¿amas a esta mujer a pesar de lo que te ha hecho? Oseas asintió con la cabeza mientras le caían las lágrimas y Dios le dijo: "entonces ve y muéstrale tu amor por ella de la misma manera que yo amo a esta nación de Israel.

De manera que Oseas fue al mercado y se quedó mirando a Gomer mientras la traían y la colocaban en el banquillo y allí estaba aquella mujer, a la que habían despojado de su ropa, totalmente desnuda ante la multitud. El subastador la pellizcó, la tocó y mostró lo fuerte que era y entonces comenzó la puja. Alguien ofreció tres piezas de plata y Oseas subió a cinco. Alguien subió la oferta a ocho y Oseas a diez. Otra persona ofreció once y él ofreció doce. Entonces Oseas ofreció quince piezas de plata y una medida de cebada, cayó el martillo del subastador y Oseas recuperó a su mujer. Se acercó a ella, la vistió y se la llevó de la mano a su casa.  Y le dijo: "Te quedarás conmigo muchos años. No te prostituirás ni serás de otro hombre; lo mismo haré yo contigo." (3:3)

Fuente: Ray C. Stedman

 

jueves, 26 de marzo de 2015

"Eloí, Eloí, lama sabactani"


"Y cuando vino la hora sexta, hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora nona. Y a la hora novena, Jesús clamó a gran voz: "Eloi, Eloi, lama sabactani ", "Dios mío, Dios mío, por qué me has abandonado" “Y Jesús, dando un fuerte grito, expiró. Y el velo del Templo  se rasgó en dos, de arriba a abajo. Y cuando el centurión, que estaba frente a Él, al ver cómo había expirado, dijo: ‘Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios" (Marcos 15:33-34,37-39).

La exclamación expresada por el Nazareno en arameo, lengua semítica con una antigüedad de unos tres mil años, encierra algunos misterios. ¿Tuvo Jesús realmente miedo en ese momento de la crucifixión? ¿Se vio desamparado? ¿Pensó que el Padre lo había abandonado? Y si fue así, ¿por qué Dios abandonó a su hijo en la cruz? Mateo y Marcos, son los únicos Evangelistas que registran este incidente en detalle, señalan que Jesús se sintió abandonado por Dios, sin explicar el por qué (Mateo 26: 46; Marcos 15:34). Se da una serie de explicaciones al respecto por esa separación del Hijo con el Padre en un momento tan dramático. Sugieren especialistas que “el Padre no podía soportar ser testigo de la muerte de su amado Hijo; y por lo tanto, se apartó en el momento del sufrimiento final de Jesús”. También, que “el Padre tenía que irse, para que Jesús pueda cumplir la expiación completamente solo”. O que Jesús “se encontró absolutamente abandonado por Dios, al igual que todos los pecadores y por eso sufrió y murió en nuestro lugar” (Gálatas 3:13). Es decir, en ese momento Dios retiró su poder protector a su Hijo, “para que Él hiciera el sacrificio expiatorio por todos nosotros”.

No se conoce con certeza cuánto tiempo duró la vida pública de Jesús, señala un comentarista de estos temas sagrados. Los evangelios sinópticos mencionan una sola fiesta de Pascua celebrada por él con sus discípulos en Jerusalén, durante la cual fue detenido y crucificado. Eso parece sugerir que su vida pública duró solamente un año. En el Evangelio de Juan, por el contrario, se mencionan tres fiestas de Pascua, las tres celebradas por Jesús en Jerusalén, lo que hace suponer que el ministerio de Jesús se prolongó durante dos o tres años. En todos los evangelios sólo hay una indicación precisa de fecha, la que se ofrece en Lucas (Lucas. 3:1-2). Jesús, como otros hombres célebres de la antigüedad, incluido Sócrates, no escribió nada, o no hay constancia de ello. Todo se basa en relatos y textos de otros.

Según las Cartas de Pablo los primeros textos sobre Jesús son posteriores en unos veinte años a la fecha probable de su muerte, luego, las principales fuentes de información acerca de su vida, o sea los cuatro evangelios canónicos, se redactaron en la segunda mitad del siglo I.  Las Cartas de Pablo de Tarso, escritas, según la datación más probable, entre los años 50 y 60 son los documentos más tempranos acerca de Jesús. El papiro de Egerton, único fragmento que no aparece en los evangelios canónicos cita una pregunta de Jesús a sus discípulos: “¿Por qué la semilla se entierra y al poco tiempo crece de modo inconmensurable?".  A continuación, Jesús hace un milagro plantando en el río Jordán una semilla de la que crece un árbol que da fruto. ¿Talvez se refieren a la resurrección? No hay acuerdo sobre este caso, el fragmento está muy deteriorado y faltan muchas palabras en el texto.

Juan Chapa, profesor de la Universidad de Navarra, ha descubierto en Inglaterra un probable evangelio apócrifo que pertenece a la colección de papiros de Oxirrinco (Egipto) y se conserva en la Universidad de Oxford. El papiro que acaba de ser editado por dicho investigador, decano de la Facultad de Teología de la Universidad española y profesor de Nuevo Testamento, explica que, “en una cara relata parte de un exorcismo realizado por Jesús, que no encuentra su paralelo exacto en los cuatro evangelios canónicos”.

Cuántos misterios más en torno a la vida y muerte de Jesús. No cabe duda que existió, pero también, que es muy difícil llegar a saber mucho en cuanto al personaje, que sobre todo ostenta un halo divino y encarna una filosofía, inaceptable para su tiempo, y quizás impracticable e inexplicable para nuestros días.

César Pinos Espinoza

cesarpinose@hotmail.com


domingo, 1 de marzo de 2015

Viaje al fin del mundo. Introducción.


 
 
“El muchacho imperial, apenas coronado, había escuchado el consejo de los generales del imperio; era más urgente seguir hacia el sur, hasta donde se acaba el mundo. Y así lo hizo: Calcúlese que, después de conquistar más de la mitad de Chile actual, trasmontó la cordillera. ¿Quién dice que esto lo inventó Aníbal el Cartaginés o Napoleón El Corso, hasta la tierra de los tucumanes, en la actual República Argentina? No halló mucha resistencia por allá, y regresó viendo el mar Atlántico --como lo decimos nosotros, que sabemos de la existencia de Platón y de Séneca-- A su consejo de generales y ministros, les declaró: Vuelvo desde el fin del mundo. Por el lado del sur, el mundo entero es mío…Y continuó viaje hacia el Hatun Cañar, tierra de su nacimiento”. (Benjamín Carrión. El cuento de la patria, pag. 41. Quito. 2002).

Por qué este libro
 

Había leído sobre la famosa Batalla del Maule, presunto enfrentamiento entre las fuerzas Mapuches y el ejército del inca Túpac Yupanqui,probablemente hacia 1485. Según dicen fue al sur del río Maule, sin triunfo ni derrota de ninguno de los contendores. Felipe Huamán Poma de Ayala se refiere a un enfrentamiento entre indios de Chile y el capitán Apu Camac Inca. Según el relato, tras someter a Atacameños y Diaguitas entre 1479 y 1485 aproximadamente, el ejército inca de Túpac Yupanqui,conformado por unos 50 mil hombres, se estacionó en territorio Picunche, grupo norte de la etnia Mapuche, llegó al río Maule y ordenó cruzarlo a 20 mil soldados, probablemente por el concejo del ayudante Vitacura, al mando del general inca llamado Sinchirunca. Los incas llamaban promaucaes o purumaucas a todas las poblaciones que no estaban sometidas a su imperio. Los promaucaes se aliaron con los Antalli, Pincu y Cauqui, formando un gran ejército. Los peruanos durante dos días enviaron parlamentarios para que reconozcan a Túpac Inca Yupanqui como su soberano e hijo del dios sol, pero los Mapuches no cedieron y ofrecieron dura batalla durante tres días. Hubo muchos muertos en ambos bandos y ninguno lograba vencer. Los incas decidieron no continuar la conquista sino fortalecer sus posiciones, administrar los territorios dominados y mejorar la agricultura de los nuevos. En todo caso fue la resistencia mapuche la que impidió continuar la conquista.
 
César Pinos Espinoza
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 


 


martes, 24 de febrero de 2015

"Viaje al fin del mundo", lanzamiento este viernes 27 de Febrero.

Se trata de un viaje real y en la historia hacia el cono sur para recordar los diversos acontecimientos ocurridos, las alegrías y desgracias de los pueblos, los paisajes hermosos y las costumbres de los habitantes. Se trae a la memoria la extinción de algunas etnias, la organización de otras, los acontecimientos como la Guerra del Pacífico, la Guerra del Chaco y la invasión peruana a territorios ecuatorianos.
"Viaje al fin del mundo" es una obra escrita con estilo periodístico y lenguaje sencillo, especialmente para motivar a los jóvenes a conocer nuestro pasado, a viajar y a interesarse por lo que a nivel mundial nos identifica.
 
El autor es periodista y freelance que ha dedicado los últimos años a viajar por todo el Ecuador y por los pueblos de Perú y Chile.
 

domingo, 15 de febrero de 2015

Reportaje: La Batalla del Portete, los miradores de Pan de Azúcar y Masta



Publicado en Diario El Mercurio el 2011/03/09.                         

A partir de la panamericana sur en el km 25 comienza la aventura. Tomamos un ramal por el Templete del Portete con dirección a las antenas, pero nos detenemos dos kilómetros más allá ante la vista occidental impresionante del cerro llamado Pan de Azúcar. Por fin estamos cerca del objetivo de hace años y lo vemos factible de coronarlo.
 

Desde el Pan de Azúcar se ve todo

El silencio del lugar es impresionante. Las aves con su lenguaje matizan el paisaje de arrayanes, helechos, moras, joyapas y otras especies que son el escenario perfecto para meditar. Más allá veo pastos verdes y vacunos. Atravieso una alambrada y asciendo poco a poco hacia la primera terraza inferior hasta llegar por fin a la cima, un espacio de unos trescientos metros cuadrados cubierto de tupida vegetación.
 
Así, al fin hemos llegado al más impresionante mirador en aproximadamente 45 minutos desde la carretera. De aquí hacia el norte se domina toda la planicie de Tarqui hasta unos 15 kilómetros de distancia, al término de la cual se divisa al Francés Urco, recuerdo de la Misión Geodésica Francesa, cuyas hazañas narra bellamente la escritora de origen francés, Florence Trystram, en su “Diálogo con las estrellas”, autora –que entre paréntesis–, jamás estuvo en estas tierras.
 
 

Guagua gallinazos de cabeza colorada
 
Hacia el sur, la visibilidad es casi total. Vemos muy cerca El Verde, La Cofradía, el estrecho valle de Girón, luego las partes altas de Yunguilla, y bien al sur, las alturas de Manú, Yulo y Guanazán, en territorio de las provincias de El Oro y Loja. Yo no sé si es el famoso cerro de Paltacalo el que veo, pero es importante por la teoría de Paul Rivet y el hombre más antiguo de América; también porque por allí reside una hermosa chica italiana llamada Dorotea. Bien, y aterrizamos.
 
Hacia mi derecha con dirección sur está el Filo de Sombrereras, abajo el Filo de Celata y lejos las alturas de El Chorro. Está pendiente la exploración de esos parajes. Al otro lado, las elevadas lomas de Manzano, Tamborloma y Rodeo. Nada más espectacular. Panorama inigualable. “Del Pan de Azúcar, un pariente mío llamado Samuel, sacaba cobre y azufre, y antes allí habían guagua gallinazos de cabeza colorada”, me contaba días atrás mi amigo don Miguel, de 84 años a cuestas. Esto me ha dejado intrigado.
 
 

La posición militar más formidable
 
Históricamente hablando, el Parte de Guerra, Boletín No. 3, del Jefe de Estado Mayor General, León de Febres Cordero, del 27 de febrero de 1829, desde Cuchipirca (San Vicente), luego del triunfo del Portete, decía: “En el sur de Colombia (la Gran Colombia), y tal vez en la América, no se halla una posición militar más formidable que el Portete de Tarqui.
 
Por la derecha e izquierda, cerros de una elevación proporcionada y coronados de chaparrales y en algunas partes un bosque algo espeso…” Pero si esta descripción de el Portete, que a no dudarlo es de El Pan de Azúcar –la parte más elevada–, es de hace 182 años, mucho tiempo atrás, antes de la llegada de los incas y durante el dominio cañari, el punto en referencia debió constituir con toda seguridad, algo excepcional, no hay duda de que fue un adoratorio sagrado, que hoy está abandonado y no recibe el cuidado y la investigación científica debida por parte de las entidades culturales de la región y el país, tal como anota el arqueólogo Jaime Idrovo.


Una obra histórica muy interesante
 
Cuento a partir del Km 24 –inicio del Portete– hacia el sur, alrededor de veinte grandes cruces, señal evidente, no de una simple creencia religiosa, sino de que por allí se produjo alguna vez un terrible acontecimiento. Así lo confirma el P. Julio María Matovelle, en su testimonio “Paseo de Vacaciones”, de sus “Obras completas”, cuando estuvo de paseo en el lugar, 43 años después de la batalla del Portete.
 
Esta es la séptima vez que visito las partes altas y bajas del Portete. La intención era conversar con los campesinos viejos y jóvenes, tomar fotografías, reflexionar y relacionar documentos que a la postre nos lograron conducir con el mayor acierto posible hacia la meta de nuestro libro “La Batalla del Portete, Argumentos y Memorias”.
 
 

¿Es que estamos muy ocupados?
 
Prosigo hacia el sur y encuentro otro monumento natural, el cerro de Masta, en la parte más alta del filo del mismo nombre. Seguramente las personas que pasan a cada momento en sus coches por la carretera, lo miran y nada más. No se fijan en los detalles que podrían esconder esos lugares: tradiciones, leyendas, historias, espectáculo de la naturaleza.
 
Girón en la actualidad, una ciudad hermosa. Hace 186 años un pequeño caserío convertido en un enorme cuartel.
Será que el temor a fallar en la conducción de un vehículo y por la rapidez de hacerlo, priva a los conductores de pensar en las cosas verdaderamente importantes y maravillosas que brinda la observación detenida y silenciosa; otra cosa es estar ubicados en un punto de altura, callados por completo, escuchando los sonidos del silencio, observando y leyendo el libro sagrado de la naturaleza y del paso del tiempo. A veces nos cuesta imaginar y hacer retrospectiva, para dar rienda suelta a esa imaginación, maravilloso don que a veces está guardado y sin uso. ¿Es que estamos muy ocupados?

Historias de gemidos, trompetas y gritos
 
Por allí cerca están, Zapata, un pueblo con el nombre del famoso guerrillero mexicano asesinado en una emboscada en 1919, y su gente, más mujeres que hombres, porque los varones se fueron lejos de la patria a trabajar, abandonando lo más preciado, sus niños; Pucucari, famoso por la Fiesta de Toros; La Cofradía, con un nombre que dice mucho; El Verde, con su escuelita “Mariscal Sucre” y las historias de gemidos, trompetas y gritos en la noche, de pailas de bronce encontradas y restos de fusiles, bayonetas, espuelas, herraduras, balas, placas y banderas; Santa Marianita y su vistosa capilla; sitios donde no quedan ni huellas de haciendas del pasado, con anécdotas chistosas como la del señor que tomaba café en un jarro por el lado opuesto de la agarradera; las grandes cruces que se veneran y se cuidan cada Semana Santa, no se sabe desde cuándo; Cuchipirca y el Puente Camacaro, en donde dicen, fue levantado en vilo el mulato venezolano de Tocuyo, Comandante llanero Camacaro, por la lanza fuerte y experta del Coronel peruano Nieto, más tarde Mariscal en su país y luego muerto con disentería; Pambadel, de recuerdos, según dicen algunos –que pueden ser traumatizantes– por aquello de la hacienda en donde se firmó el Tratado el día 28; y por fin Girón, pueblo hermoso, de portales con historia larga y modernidad, de alegrías y lágrimas, de pujanza, de todo, porque de todo hay en la viña del Señor.
 
Motivamos para este tipo de aventuras
 
Miren…unas horas de éxtasis en lugares tan interesantes, que valen para todo, incluso para revivir épocas pasadas, o para saborear un bocado, al tiempo que se conversa de tantas cosas y se recuerda lo frágil y efímero del ser humano, teniendo al frente enormes promontorios graníticos milenarios y verdor inmenso, diferente de las urbes llenas de vehículos, bulla, contaminación, paros, protestas y preocupación, siempre a las espera de que llegue el momento de decir, “gracias a Dios ya es viernes”.
 
¿Por qué no promocionar este tipo de aventuras, en orden, con respeto, con objetivos elevados y claros? En el Azuay y la región existen múltiples lugares igual de excitantes y hermosos: El Shalo y el Mirador en Pucará; Paltacalo en Guanazán; la Piedra Movedora en Huasipamba, etc. Seguiremos acudiendo a esos altares, para estar a la expectativa de los confines naturales y de nuestro propio interior. Para eso sirven estos singulares balcones del Planeta.

César Pinos Espinoza
cesarpinose@hotmail.com

domingo, 8 de febrero de 2015

Relatos de un caminante: El ganado perdido.




El ganado perdido

En un rincón de la feria de ganado de Atuntaqui  me siento a observar -como dice Piero- a la gente pasar. Cuadros y escenas de todo tipo. Ir i venir de campesinos, comerciantes y ganado. Pongo atención a las emociones y actitudes de los vendedores y compradores, humano proceder ancestral que casi no es nada nuevo.

Por allí unos niños lloran de hambre porque su madre está concentrada en el negocio  y no los atiende.  Más allá dos indios veteranos conversan no del todo amablemente, más bien con ciertas formas de amenazas, que con sus rostros contraídos se vuelven un serio peligro de incidente violento. Cerca de mí un hombre joven trata de convencer a otro para que le compre una vacona, ponderando las características del animal y las ventajas en cuanto al precio.

De todo se ve. Ventas ambulantes, puestos de comida, ruido de camiones que llegan y se van con ganado, bulla rebelde de cerdos al subirlos y bajarlos de camionetas, es decir, una auténtica feria.

Un poco más allá de donde observo está un hombre con sombrero y botas. Observa el panorama. Se ha dado cuenta de que los indios de una comunidad compran ganado, se acercan a un sitio, lo amarran en estacas y se van para seguir negociando.  Así varias veces, de modo que ya tienen reunidos unos cinco o seis animales. El hombre del sombrero y botas actúa de inmediato.  A los negociantes que pasan por el lugar señala las cabezas de ganado y les ofrece en venta. Expresa que las vende de oportunidad porque tiene que viajar urgentemente. Se acercan dos compradores, pactan en un precio barato, pagan y el hombre de sombrero y botas se marcha. Los compradores conversan, se ven contentos, miran de nuevo a los animales y con una risa de triunfo festejan el negocio.

A poco llegan los verdaderos dueños, tratan de desamarrar las ataduras de sogas para llevar a un camión pero ¡oh sorpresa!  Ya han sido vendidos, mejor dicho, revendidos y se arma la grande.  Todo es confusión y comienza la trifulca. Se acerca un policía y pide que se calmen y expliquen lo sucedido.  Hasta eso el hombre de sombrero y botas ya ha tomado su vehículo y está lejos del escenario ganadero. Nadie lo vio, nadie lo conoce. Posiblemente no lo volverán a ver nunca más.

César Pinos Espinoza
cesarpinose@hotmail.com

lunes, 2 de febrero de 2015

Del libro "Historias y sucesos": "Todo el mundo es basura". Historia en la Floreana.

"Todo el mundo es basura"
¿Qué se producía en la isla? Carne, café, azúcar, sal, todo lo que llegaba a la mesa era de producción propia. "Muchas veces se me ocurre pensar en la naturalidad con que se acepta la existencia de todos estos artículos cuando se vive en medio de la civilización. Lo poco que piensan los hombres en la cantidad de trabajo, cuidados y esmeros que cuesta preparar todo esto, la de fracasos y malas cosechas que hay que superar para producir el poquito que se ve en una mesa en la que se sirve el desayuno", expresaba Margret.

 
A Inge en la Navidad le regalaron una hermosa muñeca elaborada por su papá, pero al recibirla se sintió decepcionada, habría preferido un machete, una pala o un rastrillo. Cuando llegaron los vecinos Conwey ella les mostró un cestillo de mimbre con unos polluelos recién salidos del cascarón: "Esto sí es lindo", dijo.
Se enteraron de la guerra en Europa y se intranquilizaron. Aparecían barcos de guerra norteamericanos cerca de Floreana. Heinz se preparó para alistarse en 1940, pero le dijeron que esperara una llamada. La familia alemana Angermeyer fue expulsada de Santa Cruz. Los Conwey, norteamericanos, salieron de la isla y se fueron a Estados Unidos y el marido a una base de Seymour. Esa pequeña isla se convirtió en base militar con todo lo imaginable. "En Seymour la nueva vida ha caído como un animal salvaje. Pierden toda noción de medida. Se dejan arrastrar por la fiebre del dinero, no se contentan con reunir lo necesario para pasar una vida modesta y decorosa. Arrojan los dólares tan rápidamente como los reciben. Sencillamente no saben qué hacer con tanto dinero", anota Margret.
 
 
En el artículo "Sobreviviente al estilo Galápagos", en "Estampas", del domingo 8 de mayo de 2005, se decía que Friederich Ritter, médico berlinés, ansiaba escapar de la decadencia de Alemania de los 30. Creía que todo el mundo era basura. Soñaba en una isla lejana y tranquila.

 
A Floreana, una de las islas de Galápagos, a mil kilómetros de las costas de Ecuador, en el siglo XIX vino un marino inglés, Patrik Watkins, como el primer habitante. Entre las cenizas de la lava cultivaba verduras y frutas que intercambiaba con licor de los visitantes. A veces capturaba a marineros y los convertía en sus esclavos. Pat se pasaba casi siempre ebrio. La última vez que se supo de él había remado los mil kilómetros a las costas de Ecuador ayudado por marineros.

Versión original: "Floreana, lista de correos".
Margret Walbroel de Wittmer.

Libro "Historias y sucesos". César Pinos Espinoza

jueves, 29 de enero de 2015

Del increíble Egipto: Su Laberinto, construcción más antigua del mundo

LA DESCRIPCION DE HERODOTO
Esta es la descripción que hace Herodoto del Laberinto en su libro
"Heródoto: Informe de mi investigación"

“Como muestra de su unanimidad, decidieron dejar un monumento conmemorativo y eso los impulsó a construir el laberinto, que se encuentra situado no lejos de la margen meridional del lago Moeris, en las cercanías de un lugar llamado Crocodilópolis. Yo estuve allí y el lugar está más allá de toda descripción. Si usted hiciera un estudio de todas las paredes de las ciudades y de los edificios públicos de Grecia, vería que todos juntos no hubieran requerido tanto esfuerzo ni tanto dinero como este laberinto; ¡y eso que los templos de Éfeso y Samos no son precisamente obras pequeñas! Es verdad, las pirámides dejan sin habla al observador y cada una de ellas es igual a muchos de nuestros edificios griegos, pero ninguna puede compararse con el laberinto”.

“Para empezar, tiene una docena de jardines interiores, de los cuales seis se hallan alineados en el lado norte y seis en el lado sur. Están construidos de modo tal que sus portales quedan enfrentados. Una pared exterior sin aberturas rodea todo el complejo. El edificio mismo consta de dos pisos y 3.000 habitaciones, de las cuales la mitad está en el subsuelo y las restantes 1.500, en la planta baja”.

“Visité y vi personalmente las mil quinientas habitaciones de la planta baja, por lo tanto, estoy hablando desde mi experiencia personal, pero en cuanto a las habitaciones del subsuelo, debo confiar en la autoridad de los demás, porque los egipcios no me permitieron entrar. Allí, pueden hallarse las tumbas de los reyes que originalmente construyeron el laberinto y de los sagrados cocodrilos. Por lo tanto, nunca estuve en ese sitio y todo lo que sé, lo sé de oídas. Por cierto, me habían mostrado las habitaciones que se encontraban encima de estas; resultaba difícil creer que hubieran sido construidas por manos humanas. Los pasadizos que interconectaban las habitaciones y los senderos zigzagueantes que iban de una recámara a la otra, me dejaron sin aliento, por su colorida variedad, mientras caminaba en completa admiración desde el patio hacia las habitaciones, desde las habitaciones hacia los peristilos y de los peristilos nuevamente a las otras habitaciones, y desde allí hacia los otros patios. El cielo raso de todos estos lugares está hecho de piedra, al igual que las paredes cubiertas con figuras en relieve. Cada patio está rodeado por una hilera de columnas de mármol blanco sin juntas”.

“Justo en la esquina donde el laberinto termina, se levanta una pirámide de al menos setenta y cinco metros de alto, decorada con figuras en relieve de grandes animales. Se puede llegar a ella a través de un pasadizo subterráneo”.

“Pero, aunque este laberinto sea muy espectacular, el lago Moeris justo a mi lado, hace que uno en verdad se quede sin aliento. Su perímetro es de 3.600 estadios o sesenta shoinoi, o 666 kilómetros, tan largo como la costa egipcia entera. Este gran lago tiene una orientación Norte-Sur y su profundidad es superior a los noventa metros en la parte más honda. Probablemente, haya sido obra del hombre porque en el medio hay dos pirámides, cada una de las cuales llega a los noventa metros sobre el agua, mientras su base tiene una longitud similar debajo del agua”.

“Encima de cada uno de los edificios hay una estatua que representa a un hombre en un trono. Si se calcula la altura completa, se alcanzarán los diecinueve metros, porque cien fathom equivalen a un estadio de seiscientos pies; un fathom es igual a seis pies o cuatro anas y un pie es igual a cuatro palmos, por lo tanto, un ana corresponde a seis palmos (un pie es igual a 29,6 cm., un fathom es 178 cm., un ana, 44,4 y un palmo, cerca de 7,2 cm.)”.

“El lago no obtiene el agua de fuentes naturales, eso sería imposible porque el país circundante está seco; no, un canal es su conexión con el Nilo. Por el canal corre el agua hacia el lago durante la mitad del año y, en los seis meses restantes, vuelve a fluir al río. La ganancia para el tesoro real durante este período es al menos de un talento de plata por día, debido a los peces que se pescan allí”.

“Los habitantes de esa región me dijeron que había un túnel desde el lago hasta Sirte en Libia y, de este modo, que se podía llegar tierra adentro por el lado oeste de una región montañosa al sur de Menfis”.

Hechos acerca del Laberinto

• El más grande edificio jamás construido por el hombre.

• La construcción tardó 365 años (desde 4608 hasta 4243 a.C.).

• Contiene el “Círculo de Oro”, que es una legendaria habitación a la que se hace referencia en el Libro de los Muertos. Está hecho de granito y recubierto en oro lleno con un legado tecnológico que nos dejó una civilización perdida, mucho más antigua que el mismo Egipto.

• El conocimiento astronómico de los egipcios está escrito en grandes paredes. Todos sus hallazgos astronómicos pueden leerse en los jeroglíficos; todas las constelaciones estelares figuran en un gigantesco zodíaco.

• Muchas paredes pueden moverse y esto lo convierte en un laberinto real. Los textos antiguos hablan sobre personas que perdieron su camino y murieron; también hablan de habitaciones secretas que se encuentran en el laberinto lleno de utensilios y documentos de una civilización que floreció a escala mundial hace miles de años.

• Contiene habitaciones con documentos sobre la historia de Egipto y su conocimiento astronómico.

FUENTE: Blog A la luz de la verdad

viernes, 23 de enero de 2015

Reportaje: Hostería Hacienda La Papaya, una belleza singular.


La Hacienda La Papaya existe desde 1666. Es una vieja hacienda en la Sierra Sur del Ecuador, nunca fue lugar de actividades gubernamentales, sin embargo sufrió el flagelo de sus campos y de sus casas como consecuencia de la guerra grancolombo-peruana de 1829. El olvido y el abandono por parte de los diferentes gobiernos de turno, hicieron mella en el desarrollo de la Región y en la propia Hacienda. Su histórico pasado y los esfuerzos de sus dueños por reconstruirla, permiten en la actualidad vivir tanto la historia, la cultura, como disfrutar de maravillosa y única biodiversidad de la Provincia de Loja.

Antes de la llegada de los Saraguros, existen evidencias de la presencia de agricultores del período formativo en las partes calientes de la región de Saraguro, los tiestos encontrados tiene relación con Narrio (Cañar). Conforme a los mapas del Instituto Geográfico Militar, la toponimia de algunos nombres del área de Saraguro, tales como Selva Alegre, Manu, Chilla, Cisne, Santiago y Oña, indican una vinculación con la región Cañari.

La primera referencia que se tiene sobre la Hacienda la Papaya, se ubica dentro del segundo siglo de la colonización española en América. El Alférez Real Agustín Carrión y Merodeo, oriundo de Sevilla, compra en 1666 aproximadamente la Hazienda la Papaya y la Hazienda Cañicapa a S.M. el Rey de España, a través del juez de composición de tierras, Capitán Don Martin de Aybar, así lo declara en sus testamentos. La Hazienda La Papaya es mencionada dentro de varios documentos coloniales. Se sostiene que la Hazienda la Papaya fue una encomienda onerosa, cuya actividad era la evangelización de los indios saraguros de Tenta.


Los saraguros fueron reacios a la colonización española, y fueron capaces de retener la mayoría de sus territorios, cuando los mismos trataban de ser arrebatados por los españoles. El Rey Fernando VII concedió algunos títulos de propiedad a varias comunidades de saraguros sobre sus tierras ancestrales, como es el caso de la comunidad de Gera, con la cual lideraba la Hazienda.
Tanto en la época colonial como en los tiempos de la Gran Colombia formada por varios países y liderada por Simón Bolívar, la Hazienda la Papaya perteneció a varias familias relacionadas entre sí, como los Carrión y los Jaramillo.

La Región del Sur del Ecuador, ha sido postergada por varios gobiernos lo que ha dificultado su desarrollo. Sin embargo fue el escenario de varios hechos históricos muy importantes para la independencia de América. En 1822, el Mariscal Antonio José de Sucre, condujo las tropas de la Gran Colombia por los alrededores de la Hazienda, y pernoctó con su ejército en la vecina Hacienda Carapali, con la finalidad de unificar en el pueblo de Saraguro a varias tropas, que dio origen al llamado Ejército del Sur. Con este ejército Sucre partió al Perú para liberar la Batalla de Ayacucho, con la cual se liberó al Perú del dominio español.
 
En los últimos años de la Gran Colombia, el libertador Simón Bolívar pasó una noche en la casa de Hacienda, en su retorno a la ciudad de Cuenca procedente de Loja. Posteriormente, el General José de La-Mar, primer presidente del Perú y nacido en la ciudad de Cuenca, se enfrentó con los ejércitos de la Gran Colombia. Al pretender tomar la ciudad de Cuenca, atravesó la Hacienda la Papaya, en donde supo de la quema de Saraguro por manos y órdenes gran colombianas, durante el llamado: Combate de Saraguro. La Hacienda la Papaya se dedicó a la producción de caña de azúcar y a la cría de ganado.
 
 
Más información en nuestra próxima edición. ´FUENTE: www.haciendalapapaya.com
 
César Pinos Espinoza.